Resiliencia de Internet

Internet desempeña un papel fundamental en la sociedad actual, y la pandemia de COVID-19 ha subrayado aún más la importancia de una conexión fiable a Internet para todos. Por desgracia, no todos los países disponen de una infraestructura de Internet fiable. Los países de renta baja suelen tener redes insuficientes y carecen de una infraestructura de cableado sólida y de sistemas de interconexión redundantes. En estos países o regiones, la probabilidad de que se produzcan cortes de Internet es mucho mayor que en otros lugares.

La conexión a Internet resiliente es aquella que mantiene un nivel de servicio aceptable frente a fallas y desafíos al funcionamiento normal. En esta área de interés de Pulse realizamos un seguimiento de las métricas de resiliencia utilizando el Índice de Resiliencia de Internet para ayudar a desarrollar políticas e infraestructuras que mejoren la resiliencia de Internet a nivel local, regional y global. Nuestro objetivo inicial es el seguimiento de la capacidad de recuperación de Internet en África.

Nuestra medida global de la resistencia de Internet se basa en los siguientes pilares:

Infraestructura

La existencia y disponibilidad de la infraestructura física que proporciona la conectividad a Internet.

Rendimiento

La capacidad de la red para proporcionar a los usuarios finales un acceso fluido y fiable a los servicios de Internet.

Seguridad

La capacidad de la red para resistir interrupciones intencionadas o no intencionadas mediante la adopción de tecnologías de seguridad y mejores prácticas.

Preparación para el mercado

La capacidad del mercado para autorregularse y ofrecer precios asequibles a los usuarios finales manteniendo un mercado diverso y competitivo.